¡Lunes! ¡Lunes! ¡Lunes!

¿Quién no ha experimentado alguna vez esos sentimientos de tristeza, ansiedad, estrés y fatiga que surgen desde el domingo en la tarde? Un vacío existencial y una sensación generalizada de depresión se apodera de ti, la irritabilidad aumenta y la desesperación llega a su punto más alto…alguna vez te has preguntado ¿DE QUÉ SE TRATA TODO ESTO?

Es cierto que no es una condición médica diagnosticable, no nos darán una incapacidad o nos llevarán a una sala de urgencias para reanimarnos. Sin embargo, EL SÍNDROME DE LUNES, MONDAY BLUES O BAJÓN DE LUNES existe, y es el nombre que le damos a aquellos sentimientos de insatisfacción y desgano que aparecen de manera más generalizada los lunes por la mañana. Al parecer, el comienzo de la semana laboral y la presión social para ser productivo y exitoso, contribuyen a la aparición de estos sentimientos de ansiedad y depresión que en ocasiones pueden verse agravados por las normas culturales que valoran el ajetreo y la productividad, haciéndonos sentir culpables o avergonzados por no tener la pila al 100 por ciento todo el tiempo.

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Una explicación científica…

La ciencia detrás de este momento de la vida es compleja y nuestro “bajón” puede atribuirse a varios factores.

En primer lugar, el reloj interno de nuestro cuerpo, conocido como ritmo circadiano, juega un papel crucial en la regulación de nuestro ciclo de sueño y vigilia. Cuando nos quedamos despiertos hasta la madrugada y dormimos hasta tarde los fines de semana, el reloj de nuestro cuerpo puede desajustarse, lo que nos genera sensaciones de fatiga, aturdimiento y una falta general de energía.

Por otro lado, cuando experimentamos estrés relacionado con nuestro trabajo, ya sea por cumplir con los plazos, tratar con clientes y colegas difíciles o porque nos sentimos abrumados por la carga laboral, terminamos acumulando sentimientos de ansiedad y tensión que alcanzan su punto máximo los lunes por la mañana.

Así mismo, para muchos de nosotros, el fin de semana es un momento para ponernos al día con las actividades sociales y las responsabilidades personales. Esto puede conducir a la falta o desorden del sueño, lo que hace que nos cueste más despertar y comenzar el día el lunes por la mañana.

Indiscutiblemente, el síndrome de lunes no nos afecta a todos de la misma manera. Algunas personas, muy afortunadas pueden adaptarse fácilmente al inicio de la semana laboral y mantener un estado de ánimo positivo y motivado, mientras que otras experimentan dificultades más significativas.

Los siguientes tips son para el segundo grupo, pues siempre hay esperanza y aunque parezca una condición que nos acompañará siempre en nuestras vidas, hay muchas maneras de salir victorios@s y comenzar una semana feliz y productiva. Por ejemplo:

1. Puedes hacer una lista de tareas pendientes, priorizarlas y dividirlas en tareas más pequeñas y manejables.

2. Integra algunas actividades de ocio y esparcimiento a tu semana. No dejes todo lo bueno para el finde… ¿qué tal el cine 2x1?

3. Comienza el día con un entrenamiento breve, ya sea una rutina de yoga, sacando a tu perro a caminar, un trote rápido o una sesión de estiramiento de 10 minutos.

4. Practica técnicas de atención plena como la meditación, la respiración profunda o la visualización para ayudarte a controlar el estrés y la ansiedad.

Por último, si eres el dueño de una empresa, intenta compartir un café con tus empleados, un rato de música que despierte los sentidos de todos en el lugar o simplemente fomenta una actividad que sea característica de los lunes, por ejemplo, el Lunes de Tertulia. Si eres empleado, contribuye recibiendo estas actividades con entusiasmo y participando de ellas para mejorar el ambiente de todos a tu alrededor. Si trabajas desde casa, busca alternar espacios de trabajo y actividades de esparcimiento dentro y fuera del hogar.

Recuerda, siempre hay algo bueno en cada día, incluso en los lunes. Con una actitud positiva y la disposición de buscar actividades que nos inspiren, podemos convertir estos días en un impulso para conquistar nuestros objetivos y enfrentar cualquier desafío que se presente.

¡Felices Lunes!